martes, 24 de julio de 2007

Pero Alba, ¿cuántos años hace que nos conocemos?

No recuerdo cuándo fue la primera vez que vi a Alba, pero tengo la excusa de que tan sólo tenía un año y medio y estábamos en la guardería. Pero hay veces que me imagino cómo sería aquello:
"Yo entraría llorando muchísimo a la clase llena de niños y una pequerrecha llena de ricitos me diría: Me llamo Alba. ¿Quieres jugar conmigo? Y a partir de ahí empezaría toda una vida (cuasi) juntas. Mismo colegio, mismo instituto, (a veces cuasi) mismas amistades...
Es bonito ver por cuántas épocas pasamos:
1. La guardería.

2. La del colegio en que íbamos a jugar la una a la casa de la otra. Nos maquillábamos (es decir, nos pintábamos el Guernica en la cara), jugábamos a las Barbies (desde el mítico timbre que sonaba "din docun docun docun" hasta las escenas más porno) y a las profesoras maquiávelicas. Cuando llegaban las ochoypicodelatarde, cuando ya no había más sol que iluminara la habitación, timbraba una de las mamás. Entonces empezaba todo un revuelo: "Escóndete, escóndete, a ver si cuela y te puedes quedar más." Ahí una de las dos se escondía por la casa, llegaba mamá y decía "A ver Fulanitadetal, sal de donde estés que nos vamos ya. (...)Venga, no seas pesada y vámonos." Y si coincidía en mi casa tocábamos las maracas...
En esta época del colegio podíamos estar aprox. media hora sentadas en un sofá al borde de la muerte por asfixia de tanto reír. Pero no era risa fundamentada, sólo diversión.

3. La del instituto, en que nuestra amistad era cual Guadiana ahorasíahorano. Pero como siempre, volvimos a encontrarnos en clase, para las delicias de Laudino que pensaba que habíamos madurado (ja!) en nuestra estancia en Alemania. También para las delicias de muchos otros a los que les dimos el coñazo. Mirándolo desde fuera, los comprendo. Pobriños. Qué paciencia. Fue una etapa bastante divertida la verdad. Y muy llena de ilusiones, porque volvimos a re- conocernos: habíamos cambiado tanto y a la vez tan poco... Parecía que nunca nos hubiéramos separado, pero al mismo tiempo más veteranas y con más conciencia.

4. La presente. La universidad. Lloros, risas, blau blau. Sigue todo igual. Con muchísimo cariño, la verdad. O al menos así lo siento. Una amistad de la que suelo alardear mucho ( y no es para menos). Nos vemos de pascuas en ramos, pero sabemos de sobra lo mucho que contamos la una con la otra. En borracheiras bonitas nos preguntamos que desde hace cuánto nos conocemos, hacemos cuentas y nos echamos las manos a la cabeza. Y es que es toda la vida y así seguiremos por siempre jamás. jajajajaja cómo me alegra saberlo.


El caso es que este vídeo se lo dedico, porque creo que es la única persona a la que le brillan los ojos tanto cuando habla de un grupo de música. Lo son todo para ella y se siente enormemente orgullosa de ellos, dándole igual las mierdas culturetas que le diga la gente. Ella lo disfruta tanto...


Por ti Grifo, Billa, Villavieja, Ricitos de Oro y demás motes que te hayamos puesto toda la vida.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

sabías que lloraría eh....
joder crixutina!
no sé qué podría decir que no estropeara lo que siento ahora mismo...
estoy emocionada.
es esa manera de acabar siempre contigo, siempre un poco diferentes, siempre las mismas, lo que me emociona.
y los años pasan, y cada día estoy más orgullosa de ti, es la verdad. nunca me gustó tanto crecer con nadie :)
toda la vida! brindemos.

y gracias crixu, por hacer que me reencuentre siempre con la niña que se reía en el sofá.

Malagueña Salerosa dijo...

Joer, qué contenta me siento de que te haya gustado tanto :)


Brindemos pues!